La ultra izquierda quiere imponer ele miedo bajo la violencia agrediendo a todos aquellos que no les siguen la batuta.
Hoy jueves ha tocado a la delegada de PXL de Portugalete. Según nos comunica la delegación de portugalete de PXL a Magazine marienburg: "Que Han agredido a Nekane Delgado,
delegada de PXL (Partido por la Libertad de
Portugalete) ha sido agredida por unos supuestos “defensores” del pueblo
vasco. “Borrokas”, “abertzales”, “antifas” y demás etiquetas no sirven para
ocultar que son los mismos que llevan décadas “convenciendo” a la gente por la
fuerza de que no existe más democracia que la suya".
Nada
nuevo que no se conozca; no tienen nada que aportar. Está claro que es su
violencia criminal la única que les hace dignos de ser tenidos en cuenta. Por
lo demás, su mezcla de mediocridad, incompetencia y capacidad de agresión
sanguinaria les incapacita para cualquier tarea de reconstrucción de un pueblo
castigado por la globalización y el desarraigo. Entre todos ellos no juntan ni
una neurona y no nos interesa nada de lo que tengan que decir. Vaya, sin
embargo, por adelantado nuestra repulsa a su violencia, su estupidez y su
degradación moral.
Pero
es precisamente por la situación que esos sujetos –y no solo ellos- han
generado por lo que necesitamos gente como Nekane Delgado: una nueva generación
de vascos que rompen, al mismo tiempo, con esa clase política que ha hecho
posible el desastre y la zozobra actuales y también con ese paleomarxismo
agarbanzado que, disfrazado de vasco, converge con socialdemócratas y liberales
a la hora de anegar Euskalherria de inmigrantes ilegales. Frente a tanta
estupidez y sinrazón, Nekane representa algo tan simple y comprensible como la
defensa de los de casa. Es ella, pues, un referente moral. Por eso con la
agresión de la que hoy ha sido víctima, solo se hace más grande.
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