Homenaje atlético a sus fundadores

Eduardo de Acha, abuelo de Bernardo de Salazar, fue el impulsor del proyecto. Ayer se recordó a seis estudiantes de Minas que le ayudaron a hacerlo real

Todo comenzó el 8 de abril de 1903. Ese día se disputó en el Hipódromo madrileño la primera final del Campeonato de España de football, entre el Madrid C. F. y el Athletic Club. Ganaron los bilbaínos y entre los 5.000 espectadores que contemplaban el partido se

produjeron ciertos incidentes debido a los comentarios antivascos de parte de los aficionados. Entre los ofendidos se encontraba Eduardo de Acha, que comenzó a incubar la idea de crear en la capital un club que agrupara a los muchos vascos que, como él, residían en la capital. Ése fue el origen del Atlético.

Esa misma tarde, De Acha, abuelo del historiador de AS Bernardo de Salazar, comentó la idea con sus amigos en los salones de la Sociedad Vasco-Navarra. Recibió el apoyo inmediato de todos y el proyecto se puso en marcha. Entre estos fundadores estaban Ramón de Arancibia, Ricardo de Gondra, Darío Arana, Manuel Goyarrola y los hermanos Ricardo e Ignacio Gortázar, todos ellos estudiantes de Minas en la Escuela Superior de la calle Ríos Rosas. La misma que ayer les rindió un homenaje conjunto con el Atlético, en el año del Centenario del club.

A partir de aquel día, los acontecimientos se suceden. De Acha viaja a Bilbao por motivos personales y visita la sede del Athletic para solicitar sus estatutos y conocer la manera de fundar una sociedad futbolística. Sin embargo, allí se le propone otra idea: crear una sucursal del club vasco en Madrid. A su regreso, Acha expone esta posibilidad a sus compañeros, que la acogen con entusiasmo. Ese mismo día, 25 de abril de 1903, nace el Atlético. Sus fundadores no podían ni soñar en lo que se convertiría. Casi 101 años y 21 grandes títulos después, ayer recibieron un merecido homenaje.

Fundador, jugador y presidente

Eduardo de Acha y Otañes era militar y tenía 25 años cuando se fundó el Atlético. Al principio compaginó sus labores como jugador (en la foto de abajo posa ante la casucha que servía de vestuarios en el originario campo de las tapias del Retiro) y secretario del club, aunque en otoño de 1903 fue nombrado presidente. Redactó los primeros estatutos de la entidad y se mantuvo en el cargo hasta 1907, cuando cesó voluntariamente y fue sustituido por Ricardo de Gondra, uno de los homenajeados ayer.

Cerezo, Rivilla, Aguilera y Collar presidieron el acto

Enrique Cerezo presidió el homenaje y tuvo palabras de agradecimiento para los estudiantes-fundadores: "Hoy, tras más de cien años, el Atlético es una entidad respetada y valorada, que se ha sobrepuesto a situaciones muy difíciles. Su afición ha sabido entender que en el deporte, más allá de la victoria, está la derrota. Aquellos estudiantes son artífices de que hoy estemos aquí. A ellos les debemos la esencia del club". Junto al presidente rojiblanco estuvieron Juan Antonio Gómez-Angulo, secretario de Estado para el Deporte; Feliciano Rivilla, presidente de los veteranos; Enrique Collar, presidente de la Fundación; Carlos Aguilera, actual capitán, y otros miembros de la plantilla como Torres y Jorge.