Las tres caras del falangismo

El movimiento político español creado por José Antonio Primo de Rivera está dividido hoy entre el de ultraderecha, lo que se reclama social y lo que se autotitula de izquierdas.

Por Miquel Payeras

Falange Española (FE) la fundó en 1933 José Antonio Primo de Rivera . El año siguiente se fusionó con las Juntas de Ofensiva Nacional-Sindicalista (JONS) creadas por Onésimo Redondo en 1931. Nacía de esta manera la FE de las JONS. Al cabo de seis años, en plena Guerra Civil (1936-1939), el caudillo rebelde, Francisco Franco, Deseoso de tener todo el poder bien atado, obligó en 1937 que la formación falangista y la Comunión Tradicionalista Carlista unieran. Creaba el partido único fascista Falange Española Tradicionalista y de las JONS, que, no hace falta decirlo, él mismo presidió. Esta Falange de Franco fue disuelta en 1977 por orden del Gobierno. En los últimos cuarenta años el falangismo se ha dividido en un buen puñado de siglas, una parte de las cuales ya han desaparecido: Fuerza Nueva (1976-1982), Falange Española Independiente (1977-2004), Círculos José Antonio (1977- 1979), Frente Nacional Español (2006-2011), Falange Española 2000 (1999-2004) ...

De las seis que se mantienen activas sólo una tiene continuada presencia electoral -véase requadre- bien que con soportes actualmente ínfimos. A pesar de que posiblemente mucha gente vea iguales todas estas formaciones, en realidad manifiestan diferencias en el autoposicionamiento ideológico. Dos se sitúan a la ultraderecha. Tres rechazan ser "de izquierdas o de derecha" y pueden ser definidas como falangismo social o populista . Y, por último, otra dice que es de izquierda. 

Falangismo de ultraderecha

Falange Española-La Falange (FE-La Falange) nació en 1999 como escisión de Falange Española de las JONS. Comandado por Jesús López, el grupo inicial asumió de repente las características ideológicas y políticas de los movimientos neonazis europeos a los que se quiere homologar. Bajo el posterior liderado de José Fernando Cantalapiedra ha intensificado la apuesta política de extrema derecha. Dos ejes esenciales vertebran su discurso. Primero, el rechazo a la "masiva inmigración" y, segundo, la defensa de la "unidad nacional" contra "las autonomías que han llevado al país a una situación insostenible socialmente, moral y económicamente". El grupo publica en internet La gran esperanza, Donde los nombres de referencia -sobre Martín Saénz de Ynestrillas- cuelgan artículos de opinión y, en general, se organizan tertulias sobre temas de actualidad, se da la versión propia sobre hechos históricos para el falangismo -el último, La verdad sobre Paracuellos - y se reparten consignas a los fieles. El grupo actúa en especial en Madrid y Barcelona, habitualmente haciendo parte de La España en Marcha (LEM), un movimiento de ultraderecha que FE-La Falange comparte con los grupos neofascistas Alianza Nacional-el cual abandonó esta alianza el 2015-, Nudo Patriótico Español, Democracia Nacional y el también falangista Movimiento Católico Español. La LEM ha protagonizado varios incidentes en Barcelona con motivo de la Diada y fue el grupo que interrumpió con violencia en 2013 el acto que se desarrollaba, con motivo también del 11 de Septiembre, en el Centro Cultural Blanquerna de la Generalitat, en Madrid . 

El Movimiento Católico Español (MCE)

El Movimiento Católico Español (MCE) se fundó en 1981 como consecuencia de una escisión de Fuerza Nueva. Tras unos primeros años de mucho activismo, a partir de 2000 entró en crisis y acabó en una mera supervivencia nominal. Pero, a finales de la década, consiguió nuevos militantes y reavivó. No se sabe cuántos afiliados tiene, pero dispone de células en Madrid, Barcelona, Valencia, Sevilla ... que se dejan notar a menudo. Por ejemplo, en los hechos de Blanquerna, en Madrid, participaron algunos afiliados suyos. La última actuación violenta que protagonizaron fue durante el acto de homenaje -con unos dos o tres centenares de asistentes- al dictador Francisco Franco, el pasado 20 de noviembre en Madrid: un sintecho intentó protestar contra el falangismo y le pegaron una brutal paliza. Ideológicamente se identifica con el fascismo y reivindica como referentes tanto Franco como el fundador falangista, José Antonio Primo de Rivera, en su vertiente más cercana al fascismo. 

Ninguno de los dos grupos tiene propiamente un discurso de política social, pero convergen en algunos actos, homenajes, etc.- con Hogar Social, un grupo xenófobo y nazidedicado a repartir comida entre pobres de Madrid que puedan probar que son españoles, y los ayudan. 

Falangismo social

Los tres partidos de este ámbito se reclaman como sucesores "verdaderos" de la Falange de Primo de Rivera y la reinterpretan en el sentido más social: en el de la lucha contra el capitalismo y el marxismo mismo tiempo, y en el de la reivindicación de una república "nacionalsindicalista". 

El más veterano es Falange Española de las JONS, creado en 1976 y que se declara heredero legítimo de la histórica Falange de los años treinta. La previa a la franquista. Según la formación actual, el dictador Franco traicionó el falangismo "verdadero" cuando creó, mediante decreto, el partido único Falange Española Tradicionalista y de las JONS. A lo largo de estos últimos cuarenta años la nueva FE de las JONS ha sufrido escisiones, reinserciones de grupos que habían partido ... Ha tenido, en fin, una vida orgánica muy agitada. Actualmente cuenta "un millar de militantes en toda España, la mayoría en Madrid y Valencia", según dicen en la sede central.

Ideológicamente ha sufrido cambios. Del alineamiento que desde sus inicios tuvo con las fuerzas más ultraderechistas y violentas (algunos de sus militantes fueron juzgados por terrorismo, por ejemplo, por haber participado en 1977 en los famosos asesinatos de la calle Atocha de Madrid) ha pasado a una práctica política pacífica -así lo aseguran- ya la reinterpretación del discurso de Primo de Rivera sobre todo en clave social. Quieren ser defensores de los ciudadanos que menos tienen, del "pueblo contra la élite". Dicen que no tienen nada que ver con el fascismo e incluso niegan que su fundador histórico, José Antonio, lo fuera, de fascista. En estos momentos defienden posiciones de política social identificables como populistas.

Su presidente, Norberto Pico Sanabria, explica a este semanario que "nuestro ideario está muy de moda, nosotros no somos, ya lo decía José Antonio, ni de izquierdas ni de derechas, esta división está superada, hoy el eje político fundamental es lo que separa a los de arriba de los de abajo; la élite, del pueblo. La gente está harta de la crisis, de las élites insolidarias, de todo lo que está pasando ... y todo esto nos hace ser optimistas "con relación al futuro del partido. Eso sí, a pesar de ser optimista, reconoce que sufren "una debilidad organizativa" severa que explica -aparte del "silencio mediático al que estamos sometidos" - los pocos votos que obtienen y que hace que tenga que disputar con otros grupos la representación del falangismo.

Después de toda una vida de fascista, Ricardo Sáenz de Ynestrillas militó en Podemos y 2015 fundó Izquierda Falangista. REUTERS

En efecto, dos partidos más discuten la representatividad falangista al más veterano. El Movimiento Falangista de España (MFE) se fundó en 1979 a partir de una escisión de Círculos José Antonio, cuando este grupo se integró en FE de las JONS. Tuvo una fuerza muy relativa en Cantabria, donde sacó concejales en el municipio de Santoña (11.085 habitantes el 2106) en las elecciones locales de 1999, 2003 y 2007. En 2015 el grupo falangista de este pueblo, alineado con las tesis de la ultraderecha, se escindió del MFE porque no estaba de acuerdo con los nuevos dirigentes. Dichos dirigentes, encabezados desde el congreso de junio de 2015 por Juan Luis Bagüés Barras, apuestan por la recuperación de las "esencias revolucionarias" del falangismo de corte social y de raíz cristiana. Están en contra de la monarquía,

En Alicante, por otra parte, se creó en 2002 la Falange Auténtica como escisión de Falange Española-La Falange cuando esta formación se inclinó hacia posiciones más abiertamente ultraderechistas. La Auténticase reclama "de carácter revolucionario", "social", contraria "al capitalismo ya la explotación de los trabajadores" y aspira a ser protectora "del pueblo". Reclama la colectivización de los medios de producción pero no en el sentido marxista de la reivindicación sino que sean controlados por las "formaciones naturales" que, a su juicio, son las asociaciones "vecinales, comunales o sindicales". S'autotitula defensora del "patriotismo social", del "pueblo", de la "democracia participativa", de "la unidad del país", del "humanismo cristiano" y aspira a instaurar en España "el nacionalsindicalismo del siglo XXI" . El escritor Fernando Sánchez Dragó ha participado en algún acto de esta Falange. La Auténtica tiene en el peronismo primigenio su reflejo y, de hecho, mantiene sintonía y contactos con el Movimiento Peronista Auténtico de Argentina.

Los tres grupos falangistas populistas mantienen conversaciones intermitentes para tratar de llegar a un acuerdo de reunificación orgánica, como en el pasado hicieron CJA, FEI y FE 2000, que se fusionaron con FE de las JONS. El jefe de esta última formación, el citado Pico, asegura, en este sentido, que "la división es sobre todo el fruto de la debilidad de todos, creo que la unidad llegará naturalmente cuando uno [de los tres] sea suficientemente fuerte que atraiga la resto, y por eso nosotros nos reforzamos ". 

Falangismo de izquierda

Puede sorprender que exista un falangismo que autocalifican ideológicamente de izquierda. Pero es así. Y de hecho no es una característica tan extraña. Cabe recordar que el nazismo tuvo una rama que se definía como socialista. La lideraron en el congreso del Partido Nacionalsocialista, en 1925, Otto Strasser, antiguo militante del Partido Socialdemócrata, su hermano Gregor y Joseph Goebbels. Un año después, Goebbels pasó al grupo liderado por Adolf Hitler y los hermanos Strasser quedaron en franca minoría. Pero siguieron reivindicando la pata socialista del nazismo. Otto acabó expulsado de la formación en 1930. Fundó después el Frente Negro para continuar defendiendo un nazismo socialista. Con la llegada de Hitler al Gobierno, en 1933, se exilió por temor a ser asesinado. Su hermano Gregor se confió porque era uno de los dirigentes de las Secciones de Asalto (SA) del partido nazi, lideradas por Ernst Röhm. Grave error. La noche de los cuchillos largos, Hitler ordenó el masivo asesinato -entre 85 y 200, según las fuentes- de toda la dirección de las SA, Gregor incluido. A finales de la Segunda Guerra Mundial (1945) Otto volvió a Alemania -al sector occidental del país, bajo control de los aliados- donde vivió hasta su muerte, en 1974, y participó en varios movimientos inspirados en su pensamiento, llamado strasserismo, el cual tiene influencia actualmente en algunos grupos neonazis europeos y también en Rusia.

También es bien sabido que Benito Mussolini, el fundador en Italia del Partido Nacional Fascista, provenía del socialismo y que la política social fue siempre un eje fundamental de su movimiento. En España también se han dado relaciones entre izquierda y falangismo. A través de personas que han transitado entre los dos ámbitos ideológicos. Quien fue presidente de la Junta de Andalucía y del PSOE andaluz, José Antonio Griñán, fue falangista en su juventud; talmente lo ponía de manifiesto en 2014 la edición digital del diario Deia , citando como fuente el libro de Luis Brotons, El pasado azul oculto de muchos españoles: El joven Griñán, a 21 años, participó, uniformado de falangista, en un acto público del partido único franquista acompañado de sus tíos, Rafael y Juan Martínez Emperador, destacados miembros del régimen. Otro ejemplo: el actual presidente de FE de las JONS, el ya citado Norberto Pico, fue candidato los años 90 -según elconfidencialdigital - de Izquierda Unida en las elecciones locales en el municipio valenciano de Requena.

No sólo se trata de tránsitos ideológicos personales. La Falange histórica, la de los años 30, tuvo -casi como la izquierda del partido nazi alemán- un grupo obrerista o social representado por el dirigente Manuel Hedilla, número 2 del partido, mecánico de oficio. En medio de las peleas por el poder interno que se suscitaran tras la ejecución en noviembre de 1936 de Primo de Rivera, Hedilla se enfrentó a los deseos de Franco, por lo que fue condenado a muerte. Se le conmutó la pena por la cadena perpetua. Finalmente fue excarcelado en 1941 pero con la obligación de fijar su residencia en Mallorca, en un destierro que cumplió hasta 1947. En 1968 creó el Frente Nacional de Alianza Libre (FNAL) con voluntad de recuperar el falangismo genuino.

A la vista de las relaciones entre la izquierda y el nazismo, fascismo y falangismo, no puede extrañar que este último ámbito ideológico actual tenga un grupo que se proclame de izquierdas. Lo que sorprende, sin embargo, es que el creador y máximo dirigente de Izquierda Falangista sea Ricardo Sáenz de Ynestrillas. Este personaje es miembro de una familia de militares muy diestros. Su padre, comandante, fue imputado en dos ocasiones por intentos de golpe de Estado. Nacido en 1965, el joven Ricardo intentó participar -infructuosament-, cuando sólo tenía 15 años, en el golpe de Estado de 1981 protagonizado por Antonio Tejero. En 1990 fue juzgado y absueltopor el asesinato en 1989 del diputado de Herri Batasuna Josu Muguruza y de diez acciones terroristas contra militantes del independentismo vasco. A lo largo de los noventa fundó dos partidos nítidamente fascistas.

En 2001 fue condenado por el Tribunal Supremo a siete años de prisión por homicidio en grado de tentativa y por tenencia ilícita de armas para disparar contra un joven camello que no le había querido vender cocaína, en unos hechos ocurridos en 1997. Al ser excarcelado se fue a vivir a Argentina. Al volver se licenció en Derecho y comenzó a ejercer la abogacía. Militó FE-La Falange pero se fue alejando progresivamente del falangismo de corte fascista. En 2011 se manifestó a favor de las reivindicaciones del movimiento del 15-M porque, escribió, "siempre estaré con los que llevan los estandartes de la justicia social y la revolución, sea española o no, contra el orden capitalista y opresor ". Posteriormente aseguró que pensaba votar a Podemos y en una entrevista a elplural.com, En 2014, dijo que era militante de esta formación. 

En 2015, como culminación del cambio ideológico, Ynestrillas fundó, en Madrid, Izquierda Falangista, un grupo que asegura ser la representación genuina del falangismo de Primo de Rivera y de Manuel Hedilla y que se manifiesta antimonárquico, republicano, revolucionario y anticapitalista.